COSAS QUE NO SOPORTO I



Unos zapatos sucios, fuera de moda, o excesivamente desgastados al punto de que no se amoldan al pie, unos zapatos del número incorrecto,fuera de tono con el resto de la vestimenta.

Lo primero, la suciedad de tan bello elemento, me habla de dejadez, falta de voluntad, y pasotismo emocional de la persona que los porta. No me refiero, a que de pronto, descargue una nube, te hayas visto expuest@ a la inclemencia del tiempo, hayas atajado corriendo por medio de una zona no pavimentada y te hayas embarrado los zapatos. O que llegues de trabajar y el sudor y el esfuerzo con el que una persona se gane el pan, se vea reflejado en sus calzado. No, me refiero a esa solera que se va quedando en el calzado, a través del uso cotidiano, que deberiamos borrar, limpiar, pulir y abrillantar al final de una jornada o antes de volver a lucir ese complemento.

Unos zapatos fuera de moda..., no estoy diciendo que para que una persona me guste, haya de calzar unos Jimmy Choo de última temporada, que a parte de caros, son de manufactura extranjera, y no hay nada mejor que unos zapatos Made In Spain. Me refiero a unos zapatos de hace 10 o 15 años, de esos que te compras, pero como no usas ese estilo, pues te los pones, aunque su diseño no es que sea atemporal, sino digno de un museo constumbrista.

Excesivamente desgastados: Quien ama el calzado, seguro que cuando más cómod@ se siente, es cuando el zapato se adaptó por fin al pie, al modo de andar de la persona, pero de ahí, a que se luzca las puntas abiertas, unos agujeros en la suela por donde cabe una moneda, o unos tacones que ya se estan desgastando por falta del parche de goma, o totalmente deshormados. Quien maltrata unos zapatos, es capaz de maltratar cuarquier otra cosa u individuo. Aún en las ciudades más grandes, existen los zapateros, esos maravillosos duendes, que te arreglan con sus manitas y te reparan el zapato, hasta que ya el zapato no tiene reparación alguna claro. No hay perdón para esto hoy día cuando la industrialización y la automatización en el proceso de fabricación del calzado ha abaratado costes.


Fuera de tono con la vestimenta: Hay quien lo hace aposta, ha quien lo hace por moda, y hay quien lo hace por simple falta de glamour y capacidad de coordinar su estilo. Seguro que a todos nos gusta ir elegantes, un buen punto de partida, es comenzar a sentirnos elegantes por los pies.

No hay comentarios: